Para cambiar el interior de la casa hay diferentes formas, pero la más relevante y sencilla de realizar es la pintura.
Primero, es necesario determinar el color. La información detallada sobre el producto se encuentra en la etiqueta: instrucciones de uso, finalidad de la pintura, líneas para el almacenamiento tras abrir, normas de seguridad para trabajar con este tipo de pintura, ya que algunos tipos pueden ser tóxicos y al trabajar con ellos es necesario usar mascarillas, guantes y preferiblemente gafas.
Por ejemplo, las pinturas de látex crean un recubrimiento fuerte y además son resistentes al agua, las pinturas acrílicas crean un efecto mate. Las más demandadas son las pinturas ecológicas, ya que son perfectas para habitaciones infantiles.
No hay que olvidar tener en cuenta la iluminación de la estancia, ya que con poca luz, los tonos oscuros reducirán visualmente el tamaño de la habitación, y los claros lo aumentarán. Si la estancia tiene poca luz, da preferencia a los tonos claros.
Para proceder directamente a pintar, se necesitará:
- palo con mango para el rodillo,
- el propio rodillo de pelo corto (de hasta 10 mm de largo),
- un rodillo pequeño para pintar esquinas y otros lugares de difícil acceso,
- brochas (preferiblemente planas y redondas),
- cinta de carrocero,
- plástico y cartón para proteger el suelo y los muebles del polvo y la pintura,
- un recipiente especial con rejilla para escurrir el exceso de pintura.
Primero, hay que cubrir todos los muebles con plástico, el suelo es mejor cubrirlo con cartón o papel impermeable. Luego, pega la cinta de carrocero en la parte superior del rodapié, el marco de la puerta, las ventanas.
Siguiendo las instrucciones, hay que preparar la pintura, añadiendo un 15% de agua para la primera capa, cerrar el cubo con una tapa y remover hasta obtener una masa homogénea y verter en el recipiente para pintar.
Primero, hay que pintar las esquinas, usando un rodillo pequeño y brochas. Sumerge las herramientas en la pintura, elimina el exceso, escurriendo la brocha sobre la rejilla del recipiente. Aplica la pintura uniformemente en la pared.
Antes de empezar a trabajar con el rodillo, hay que mojarlo en agua y escurrirlo, así el rodillo absorberá suficiente pintura y se aplicará de manera uniforme en la pared.
Los movimientos deben hacerse de arriba abajo, presionando el rodillo contra la pared. Si es necesario, vuelve a impregnar el rodillo con pintura.
De la misma manera, pinta toda la superficie de las paredes en dos capas. Presta especial atención a que la pintura quede uniforme, sin chorretones ni huecos. Si necesitas parar de trabajar un tiempo, es mejor envolver el rodillo en plástico y tapar el recipiente con pintura para que no se seque.